Son diferentes los motivos que pueden generar la necesidad de cargar combustible en un tanque o recipiente plástico, por ejemplo cuando nuestro carro se queda sin combustible o cuando necesitamos abastecer una máquina de difícil transporte a la estación de combustible. En esos momentos es clave saber cómo realizar ese proceso de manera apropiada.
Al cargar y transportar combustible en un tanque o recipiente plástico, lo más importante es hacerlo con seguridad para minimizar cualquier riesgo asociado. Te compartimos algunas recomendaciones para hacerlo de forma segura.
Usa un tanque adecuado. Eso quiere decir un tanque diseñado específicamente para ese uso, en algunos lugares se conocen como tanques homologados, lo cual indica que sus materiales son aptos y seguros para contener combustibles.
Verifica que el tanque esté limpio y que no esté roto para evitar derrames cuando almacenes el combustible.
Siempre que cargues combustible, sea en el tanque de tu auto o en un tanque externo, asegúrate de apagar el motor del carro, evitar el uso de celulares y antes de cargar el combustible, elimina la electricidad estática que puedas tener, para ello toca una parte metálica del vehículo.
Siempre que puedas, realiza la carga de combustible en un espacio abierto para evitar la acumulación de vapores.
Realiza una carga controlada de combustible, mantén una presión moderada para evitar derrames. Es importante que no llenes el tanque demasiado, siempre deja un espacio suficiente de aire.
Para vaciar el combustible, siempre que puedas, usa un embudo y antes de iniciar coloca el tanque de combustible en el suelo.
Al finalizar la carga del combustible, almacena de forma apropiada el tanque en un lugar seguro y ventilado, usando su tapa. También recuerda lavar muy bien tus manos.
Tu seguridad es siempre lo más importante.